En Veracruz-Boca del Río, es casi nulo el interés de los jóvenes por el sacerdocio
Por Sergio Lara
Veracruz, Ver.- El rector del Seminario San José de la ciudad de Veracruz, Fermín Astillado Moreno, los jóvenes de la zona conurbada son los que menos muestran interés por el sacerdocio.
El padre, dijo que en contraparte los jóvenes originarios de la periferia, como la Cuenca del Papaloapan y zona sur de la entidad son los que mayormente muestran interés por tomar los votos sacerdotales.
El entrevistado, comentó además que a diferencia de las escuelas y universidades, los jóvenes que abandonan el seminario lo hacen a lo largo de sus estudios.
“Es un número más o menos considerable, creo que en lo que va de este año, por decirlo de un modo, hemos tenido como cinco seminaristas de diferente grado, porque inclusive del Seminario Menor, hay chavos que dicen no decido continuar, a la mitad también en filosofía o teología, dicen no, no son solo de último año, sino en las diferentes etapas y momentos que ellos deciden que no”.
Cada año, el 50 % de los jóvenes dejan el seminario, mientras que el otro 50% continúa con sus estudios sacerdotales.
No es preocupante para la iglesia católica por el contrario, en estos tiempos, se requieren de sacerdotes que esté a la altura de los desafíos que se están viviendo, es decir, que respondan no solo intelectualmente sino moral y espiritualmente, sobre todo en la manera de cómo hablar de Dios, a los jóvenes principalmente.
A la fecha, se cuenta con 50 seminaristas, distribuidos en las tres casas que tiene la Diócesis de Veracruz, es decir, 20 en el Seminario Menor, 7 en el propedéutico y 23 en el Seminario Mayor, así como 11 sacerdotes que están colaborando con ellos.
Apuntó que la ordenación también es variado y no siempre se realiza cada año, pues por ejemplo refirió que el año pasado, salieron tres seminaristas y el antepasado fueron cinco, pero este 2024, no saldrán ninguno.
Dijo que todo seminarista tiene un proceso y va discerniendo en la medida en la cual van respondiendo a Dios, es decir, para algunos es muy complicado el seguir diciendo sí a Dios y están en ese proceso de decisión.