La patología de los sistemas políticos; ¿por quién votar?
Primera parte
26/ 05/2024.
Pensar en la política nos remite a la asamblea, a la toma de decisiones colectivas, al poder, al derecho y la moral, a la ciencia de gobernar, a los asuntos públicos o a la teoría del Estado, dichos criterios de explicación constituyen el campo político el cual contiene diferentes sistemas, la diversidad deformas en que se organiza la política es condicionada por la economía, pero a su vez, la economía es condicionada por la política. El campo económico contiene diferentes modos de producción o sistemas económicos, el actual es conocido como capitalismo y lo hemos experimentado o conocido en diferentes etapas y formas de gobierno, dicho modelo eclosiona hace aproximadamente quinientos años, a partir de la etapa conocida como modernidad, de origen europeo y que tiene su condición de posibilidad a partir de la colonización de América Latina, en razón de la explotación de los nativos, la esclavitud y el saqueo de recursos naturales, principalmente metales como la plata y del oro. De lo anterior se desprende que el centro del capitalismo mundial inicialmente se localizó en España-Portugal, al resto de naciones se les conoce como periferia, hablamos del binomio centro-periferia del sistema mundo.
La centralidad del poder capitalista ha tenido como protagonistas a Holanda, Inglaterra, Francia y actualmente el imperio capitalista lo tenemos en EE UU; es pertinente señalar que a partir de la Revolución Francesa, se identificaron dos corrientes: la izquierda y la derecha, como dos sistemas políticos opuestos, sin embargo hay en medio de éstos extremos diferentes variantes, que están representados en diferentes sistemas de gobierno, los cuales se pueden evaluar dependiendo de sus propuestas y sus formas de ejercer el poder político, uno de los criterios es el modelo económico, si el énfasis se establece en el libre mercado y en las libertades individuales, nos ubicamos más cercanos a la derecha, en el otro lado se piensa en controlar el mercado y en los derechos sociales, sin embargo, los dos sistemas prometen beneficios para la sociedad.
De la misma manera la modernidad explica el avance en las libertades y los derechos individuales frente al Estado, las cuales tiene un sustento explicativo-teórico, dicho con otras palabras se basan en razones que hacen plausible su visión de mundo; el capitalismo europeo surgido de las ruinas del feudalismo, sustentó su despliegue en diferentes pensadores y supuestos, por ejemplo el derecho a esclavizar a los vencidos en una guerra -pensamiento útil en el proceso de acumulación originaria-, el contrato social, el individualismo auto constituido -pienso, luego existo-, la no intervención en el mercado, las reformas de la iglesia que modificaron la perspectiva del trabajo y de los interés en el préstamo, el “desencantamiento del mundo”, entre otros supuestos. Dicho conocimiento y filosofía la conocemos como eurocentrismo y actualmente como nortecentrismo, éste último desarrolló en los ochentas, una teoría conocida como neoclásica o neoliberalismo. A partir del compromiso con dicha visión, podemos tener una aproximación a la posición ideológica de los partidos políticos en México, de lo que se sigue dos visiones de lo político.
La postura del PRIANRD, se alinea incondicionalmente con el proyecto del capitalismo central, evidencia de ello son las reformas estructurales; recordemos las privatizaciones de las empresas del Estado, de los servicios médicos y de las pensiones de los trabajadores y burócratas, el desmantelamiento del estado de bienestar, la flexibilización laboral, entre otros cambios, todos, en contra de los derechos del pueblo y avalados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación; lo cual ocasionó el malestar social, expresado en la pobreza y una profunda desigualdad, que obligó a millones de mexicanos a abandonar sus lugares de origen, además generó las condiciones desfavorables para la soberanía del país y para la seguridad nacional.
Las víctimas de dichas políticas abarcaron a la mayoría de la población, se trata de los excluidos de un sistema político, es decir, el pueblo, el fundamento de la Cuarta Transformación. De aquí que en MORENA la crítica a la derecha se sustenta en las patologías de su sistema político, la perspectiva no se hace desde la visión de los dominadores, es a partir de la mirada de los oprimidos; para la izquierda, la política tiene el imperativo de salvaguardar la vida de los representados, pues nadie puede ser libre en la miseria, lo que da sustento al compromiso expresado en el principio: ¡por el bien de todos, primero los pobres!
